miércoles, 9 de septiembre de 2009

PROTECCIÓN CONTRA EL CÁNCER

Es una enfermedad grave ocasionada por la multiplicación de células en forma desordenada y anormal, originando tumores malignos que tienden a expandirse fuera de su origen.
Hay factores genéticos que predisponen a contraer esta enfermedad, y sustancias químicas, que pueden originar sobre todo cáncer de pulmón, lo mismo que el tabaco. La exposición prolongada al sol y las camas solares pueden dar lugar a padecer cáncer de piel. También pueden ser provocados por virus o traumatismos. Por ejemplo, no conviene friccionar ni tocar demasiado los lunares y verrugas. Otro factor son las radiaciones.
Prevenir el cáncer no es tarea sencilla pero vale la pena evitar fumar, beber alcohol, sobre todo en exceso, protegerse en caso de estar expuesto a radiaciones o a la inhalación de sustancias químicas por motivos laborales, no exponerse al sol en horas pico, y hacerlo en forma gradual, y erradicar el uso de camas solares.
Pero en cuanto a prevención se refiere, un tema importante lo constituye la dieta. Ya sabemos a través de los distintos artículos publicados en esta sección “Vida Sana” la importancia de cada alimento para nuestra salud. Especialmente una dieta vegetariana es muy importante para la prevención del cáncer.
Entre los alimentos más recomendados están el brócoli, los tomates cocidos, las lentejas, los porotos de soja, la harina de soja, la calabaza, todas las verduras de hojas verdes, las frutas, y el arroz integral. Las mujeres chinas, por ejemplo, con dieta vegetariana, desarrollan un índice mucho menor de cáncer de mama.
Para apoyar investigaciones ya comprobadas sobre la virtud de la dieta vegetariana en la prevención y el retardo de expansión de la enfermedad, se realizó un nuevo estudio que comprendió a 60.000 personas que efectuaron científicos de Nueva Zelanda y Reino unido, y que se publicó en “La Revista Británica de Cáncer”.
Allí se demostró que consumir vegetales protege contra ciertos tipos de cáncer como el de sangre (cáncer del sistema linfático y leucemia), estómago, médula ósea, y vejiga. En el cáncer de sangre por ejemplo, el porcentaje de los vegetarianos de sufrir la enfermedad se redujo a un 45 % con respecto a los que llevaban una dieta carnívora, y en el de estómago, la reducción fue del 30 %.
No se comprobó si la razón es que los vegetales protegen contra estos cánceres o las carnes serían las causantes de virus o mutaciones.
En los cánceres de colon y recto, en este estudio, no se observaron diferencias entre vegetarianos y no vegetarianos.

martes, 14 de julio de 2009

Dieta Vegetariana para niños


Para estar seguro de que la dieta vegetariana es la adecuada para el niño, es necesario tener algunos cuidados

1- Las comidas principales, es decir, desayuno, comida y cena, deben suministrar energía, proteínas, vitaminas y minerales, al niño. ¿Dónde las van encontrar? Pues en alimentos como cereales y derivados, en los tubérculos, legumbres, aceite de oliva y semillas, frutos secos y algunos dulces. También se encontrarán en la leche y derivados, huevos, así como en las frutas, verduras, y hortalizas.

2- Considerar importante la digestibilidad, así como la calidad proteica. La combinación de algunos alimentos con otros puede proporcionar una proteína más completa.

3- Cuanto más pequeño sea el niño, más exigencias nutricionales tendrá. Aunque su capacidad estomacal sea más limitada, los alimentos tendrán que proporcionar calorías y nutrientes suficientes en un pequeño volumen. No debe haber exageración en los alimentos ricos en fibra, para evitar que haya demasiada absorción de nutrientes, lo que provocaría gases e incluso diarrea.

4- En la dieta debe haber alimentos ricos en ácidos grasos esenciales y de la familia omega 3, presentes en los frutos secos y en aceites de semillas.

5- El calcio será absorbido por el niño en el consumo de leche y derivados. Su asimilación dependerá mucho de la vitamina D, tan presente también en los lácteos. La exposición controlada al sol asegura la formación endógena de esta vitamina.

6- Si la dieta incluye huevos, cereales, legumbres, no existe el peligro de que el niño sea deficiente en hierro.

martes, 26 de mayo de 2009


LA DIETA VEGETARIANA


Está comprobado que si es variada, completa y equilibrada, la alimentación basada en frutas, verduras y cereales no sólo es deliciosa, sino que además aporta todas las vitaminas, minerales y nutrientes que necesitas, aumenta tu bienestar y vitalidad, y te protege de enfermedades.


Distintos vegetarianos


Veganos: Sólo consumen vegetales. Lactovegetarianos: No consumen carnes rojas, pescados, ni aves, pero sí lácteos y miel. Ovolactovegetarianos: No consumen carnes rojas, pescados, ni aves, pero sí huevos, lácteos y miel. Semivegetarianos: No consumen carnes rojas, pero sí pescados, aves, huevos, lácteos y miel.
El régimen ovolactovegetariano es el más recomendable para iniciarte en el vegetarianismo, porque te deja satisfecha, te aporta fibra, reduce el consumo de grasas saturadas, hace que tus riñones se esfuercen menos, y te aporta los mismos nutrientes que las carnes y lácteos, siempre y cuando sea variado y selecciones bien los alimentos.


Poco a poco


Sin embargo, antes de volverte vegetariana, te aconsejamos consultar a tu médico o nutriólogo; es indispensable que él te supervise porque este régimen conlleva cierto riesgo, sobre todo si estás embarazada, en período de lactancia, si eres deportista, si gastas mucha energía o estás todavía en crecimiento o desarrollo, porque en estos períodos necesitas aumentar tu consumo de nutrimentos. Si vas a empezar un régimen vegetariano, sigue estas recomendaciones:
No cambies tu alimentación de un día para otro, porque tu cuerpo necesita un tiempo para adaptarse a los cambios gradualmente.
Empieza reemplazando dos o tres veces por semana la carne por cereales o granos.
Ve reduciendo poco a poco las cantidades de carne o pescado.
Prepárate comidas donde la carne y el pescado se usen como condimento y no como ingrediente principal, por ejemplo paellas o ensaladas.
Incluye con mayor frecuencia frutas, frutas secas, verduras, cereales, leguminosas, huevos, lácteos, algas, levadura de cerveza y derivados de soya.

viernes, 3 de abril de 2009

Paté de pimientos



Esta receta de pimientos está elaborada con ingredientes poco habituales en los patés vegetarianos y, sinceramente, queda como para chuparse los dedos. Los patés siempre nos sacan del apuro ya que son rápidos de hacer y siempre tienen muchísimo éxito.


Ingredientes para el paté de pimientos
2 tazas de pimientos rojos crudos, con piel.
1 taza de anacardos.
1 cucharada de tahini (puré de sésamo o ajonjolí).
2 cucharadas de levadura de cerveza desamarrada.
½ taza de cebolleta picada.
1 diente de ajo.
2 cucharadas de zumo de limón.
1 dátil.
Sal.
Agua.


Elaboración del paté de pimientos
Triturar todos los ingredientes, menos 1 cucharada de limón y ½ dátil. Si la batidora no puede con ellos, añadir agua poco a poco hasta que el paté alcance una consistencia cremosa. Es importante no pasarse pues el paté se convertiría en salsa de mojar (líquida).
Corregir de sal y limón.
Nuestro consejo
Aquellas personas que no dijieran muy bien los pimientos crudos pueden ponerlos asados y sin piel ya que quedan más digestivos.Podéis añadir alguna verdura rallada, como zanahoria o calabacín.Es recomendable, primero, utilizar la mitad de los ingredientes dulces (dátil) y agrios (limón) que pide la receta. Luego probar y corregir.
Este paté de pimientos se puede untar sobre tostadas o en sándwiches y bocadillos con un buen puñado de germinados de alfalfa y rabanito y un pimiento rojo cortado en tiritas.
También puedes untar el paté de pimientos rojos sobre hojas de alga Nori y meterlas en el horno a 130º C durante 10 minutos. Otra opción es servirlos sobre medio tomate o sobre un champiñon marinado, untado sobre hojas verdes con verduritas troceadas o cortadas julienne, con tortillas mexicanas, o en ramas de apio.
Por último, ¡siempre podéis optar por tomároslo a cucharadas!

Cocinando Contigo

Empieza este blog de cocina vegetariana para que puedas disfrutar de nuestras recetas que procuraremos que sean sencillas y, por supesto, muy ricas.